IZQUIERDA UNIDA: DESDE EL GOBIERNO, CON O SIN CONCEJALES, SIEMPRE AL LADO DE LAS CLASES TRABAJADORAS

IZQUIERDA UNIDA: DESDE EL GOBIERNO, CON O SIN CONCEJALES, SIEMPRE AL LADO DE LAS CLASES TRABAJADORAS

domingo, 24 de mayo de 2020

Combatimos la precariedad y estacionalidad que asola al sector del turismo



Intervención de Alberto Garzón, Ministro de Consumo, en la sesión de control al Gobierno

Alberto Garzón: 

«Si Alemania tiene salarios más altos no es porque aquí seamos más vagos, sino porque tienen una estructura productiva de mayor valor añadido. Debemos reforzar el turismo elevando valor y priorizando calidad sobre cantidad»

jueves, 21 de mayo de 2020

A LA MUERTE DE JULIO ANGUITA


Se nos ha ido Julio Anguita, y con él se ha ido un ejemplo de honradez y coherencia política, un símbolo de nuestra izquierda. Tras la muerte de Julio Anguita muchas personas han dicho y escrito alabanzas hacia su figura, lo cual no impide que haya habido comentarios carroñeros que definen a quien los hace.
De él siempre se recuerda su famosa frase de “programa, programa, programa”, reivindicación de que cuando hay que hablar y acordar con otras fuerzas políticas, el resultado conseguido debe ser público y conocido para así poder exigir su cumplimiento, ningún oscurantismo, saber lo que se consigue y a lo que se renuncia.
Y esta frase no es sino un símbolo de su compromiso político: el programa es el resultado de un debate de ideas, fruto del conocimiento y la reflexión sobre la realidad social. De él se decía que era un radical y la defensa era sencilla: hay que ir a la raíz de los problemas para conocerlos, estudiarlos  y proponer soluciones.
Acusarlo de radical era un comentario casi benévolo, peor intención tenía quien le tildaba de comunista, pensando que ser comunista es una ofensa, un pecado, una tara o cualquier cosa peor; sin embargo, para Julo Anguita, ser comunista era un honor porque era la definición de quien lucha contra el poder y en favor de los más necesitados, con sus luces y sus sombras, como la vida misma en cualquier aspecto.
Conocidas son sus posiciones críticas frente a la transición de régimen, su posición aislada frente al Tratado de Maastricht, a su moneda única y a su olvido de las cuestiones sociales, propiciando una Europa de banqueros y no de personas; y algo de razón le dio el tiempo cuando vemos como ha sido el desarrollo de la crisis del año 2008: rescate financiero a costa de las clases populares.
Finalmente, recuperar otra de sus cualidades: hablar claro y ser coherente: cuando dejó su cargo de diputado nacional renunció a la pensión vitalicia que le correspondía, volvió a ejercer de maestro, como a él mismo le gustaba definirse, y se jubiló como el resto de los ciudadanos, sin privilegios, porque ese era su principio de vida, ser uno más del pueblo, y ser uno más para el pueblo, y ese comportamiento ha sido reconocido hasta por sus enemigos.
Sirva su recuerdo para mantener viva la llama de lo que hay que seguir defendiendo, apoyando y luchando por los más desfavorecidos, reivindicando la lucha de clases  y combatiendo siempre al capitalismo.
Hasta siempre maestro Julio Anguita, hasta siempre camarada.
Agustín Ramírez Molina

miércoles, 20 de mayo de 2020

¿Por qué el Turismo aporta un bajo nivel añadido?


Parece que las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón  respecto al escaso valor añadido que supone el sector turístico para España han levantado ampollas en varios sectores como si el primer motor de la economía española se menospreciase,  y no es que no tenga razón, porque la tiene, quizá el revuelo generado se deba a que  ha dado en el punto de flotación.
En primer lugar porque en el reparto que Europa nos ha asignado en la economía ha sido el del sector servicios y las medidas tomadas desde hace décadas por nuestros gobiernos han sido las de desmantelar el sector industrial y el de invertir lo mínimo posible en Investigación y Desarrollo, centrándonos casi exclusivamente en el Turismo, sin diversificar en otros ámbitos. Esto ha hecho que en una crisis como la que tenemos ahora veamos que el Turismo, del que dependemos casi exclusivamente, esté gravemente afectado y nos resulte difícil afrontar las consecuencias.
En segundo lugar, y muy importante, es que quienes se alarman de las palabras de Garzón diciendo que España está en la punta de lanza de los países como destinos turísticos, no mencionan que la productividad y competitividad del sector se debe, en gran medida,  a las condiciones laborales de los trabajadores y que los beneficios del  Turismo no repercuten proporcionalmente en los ciudadanos que dependen de él. De todos son  sabidas de precariedad y la temporalidad  de los contratos, la diferencia entre las horas contratadas y las trabajadas realmente así como las horas extras no pagadas.
Si los empresarios del sector turístico, que tanto se quejan, no se enriquecieran indebidamente del trabajo de sus empleados, quizá si podría suponer un auténtico valor añadido para nuestro país, porque la imagen que se proyecta como un paraíso de vacaciones no repercute en el bienestar de la población, especialmente en los trabajadores de bares, hoteles y restaurantes.

Matilde Tenorio

domingo, 17 de mayo de 2020

AL CALIFA ROJO


Julio: 
Camarada, compañero, nadie como tú me ha enseñado a ver la luz donde solo había tinieblas. Tu clarividencia  en el análisis de los problemas actuales, tanto de la clase trabajadora como de la Humanidad, y tus aportaciones para solventarlos, basados siempre en los clásicos del Marxismo, son y serán imprescindibles para seguir aprendiendo y luchar con una buena base teórica y práctica contra el neoliberalismo en el que nuestra sociedad está inmersa.
Ahora, más que nunca, tus enseñanzas y consideraciones deben servirnos para afrontar un mundo mejor en el que el Ser Humano y la Naturaleza sean el centro de la Política.
Sigues con nosotros aunque sea en el Olimpo de los Dioses.
Matilde Tenorio

A Julio Anguita



Me incorporé a Izquierda Unida cuando nuestro Coordinador era Julio Anguita. Empecé a comentar sus escritos  e intervenciones con otros compañeros y compañeras de la recién creada Asamblea de Hoyo en el bar donde ahora existe un Kebab. Los debates  de ese tiempo me hicieron cambiar muchos de los supuestos paradigmas que entonces tenía, en concreto recuerdo algunos sobre el desarrollo de las fuerzas productivas y el crecimiento son límites; fue con esos debates con los que mi conciencia ecológica, más bien ambientalista, fue evolucionando hacía la ecología política y que el modo de producción capitalista es incompatible con la conservación de la naturaleza y con el futuro de la humanidad y del planeta.

Fueron esos debates sobre lo que el compañero Julio escribía o decía lo que me llevó a resolver algunas de mis contradicciones sobre lo que entonces las contradicciones que yo tenía entre el análisis marxista y la ecología, a descubrir autores que descubrieron que no sólo marxismo y ecología no se contraponían, sino que puedo llegar a afirmar que Marx, junto con Engels, fueron quienes esbozaron la ligazón entre el modo de producción capitalista y la destrucción del planeta.
El compañero Julio ya no está físicamente entre nosotros; nos ha dejado un compañero, un camarada, un referente de la izquierda transformadora y, sobre todo un luchador, un comunista y un maestro.
Un compañero que, ya desde su papel como fundador de Izquierda Unida siempre luchó por la unidad de esa izquierda; eso sí siempre en base a acuerdos programáticos para mejorar la vida de la clase trabajadora.
Julio para mí y creo que para la mayoría no fue un líder sino un dirigente, una persona que, como buen comunista, desde sus puestos de dirección política ejercía esta de manera colectiva; un dirigente que ponía por encima de todo la necesidad de difundir, de debatir que ponía en práctica las famosas recomendaciones del dirigente comunista italiano Antonio Gramsci “Instrúyanse, porque tendremos necesidad de toda nuestra inteligencia. Agítense, porque tendremos necesidad de todo nuestro entusiasmo. Organícense, porque tendremos necesidad de toda nuestra fuerza”.
Ayer, 16 de mayo, se nos fue un gigante de la política, de la Política con mayúsculas. Un defensor de la clase trabajadora y de su necesaria unidad. Julio fue un hombre incorruptible que, en un sistema corrupto, hizo de los principios una de las armas más poderosas que puso al servicio de la clase trabajadora y de toda la humanidad.
En muchas de sus intervenciones el compañero Julio, con su gran capacidad pedagógica se adelantó a los tiempos con unos análisis que, no sólo se han ido demostrando acertados, sino que con el paso de los años esa capacidad está siendo reconocida por la mayoría de los militantes de izquierda, aunque nunca por todos, como les pasa a los grandes.
Después de su etapa como Diputado por Izquierda Unida, tiempos en los que ésta alcanzó su mayor representatividad, volvió por un tiempo a su trabajo de maestro y renunció con coherencia, integridad y desprecio a todos los privilegios posibles, cuando ya se empezaba a hablar de “las puertas giratorias” tan traspasadas ayer y hoy por muchos de los que le criticaron.
Compañero Julio, físicamente te has ido, pero intelectual y políticamente sigues con nosotros.
Salud.
José Ramón Mendoza

martes, 5 de mayo de 2020

¿Qué cosas están en riesgo si no se prorroga el Estado de alarma?


No es ético ni patriótico. 
¡¡Es irresponsable‼️  

El Estado de Alarma es la principal arma para combatir la pandemia y la crisis. Si el Congreso no lo prorroga, 3'5 millones de personas perderán su 🛡escudo social, sus únicos ingresos. 

Estos serían alguno de sus efectos:

1️⃣  Desaparecerá la protección contra el despido por el Covid-19 y el procedimiento simplificado de acceso a ERTE y prestación por desempleo por Fuerza Mayor, que ahora se garantiza automáticamente. Probar la causa de acceso al ERTE será mucho más difícil sin el Estado de Alarma.

2️⃣  Desaparecerán las condiciones favorables de acceso a prestación por desempleo y agilización de su cobro. En Estado de Alarma el tiempo de desempleo por ERTE no computa para futuras prestaciones de desempleo. Si desapareciera, el desempleo cobrado
reducirá futuras prestaciones.

3️⃣  Desaparecerá la exoneración de cuotas empresariales a la Seguridad Social a las empresas respecto a las personas trabajadoras afectadas por ERTE.

4️⃣ Desaparecerán las medidas para cooperativas que les permiten destinar determinados fondos a paliar los efectos del COVID-19.

5️⃣  Desaparecerá la protección a trabajadores/as temporales, ya que durante el Estado de Alarma se prorrogan la duración de los contratos temporales y también los subsidios extraordinarios para personas desempleadas con contrato temporal que no tuvieran cotización mínima.

6️⃣  Desaparecerá la ampliación de cobertura por desempleo a colectivos que no tenían ese derecho: El Estado de Alarma estableció derecho a prestación de desempleo en caso de extinción de contrato durante el periodo de prueba o a quienes habían dejado un empleo por acceder a otro.

7️⃣  Desaparecerán las condiciones especiales de acceso a la prestación por cese de actividad de los autónomos/as: Esta prestación por disminución de ingresos superior al 75% tiene carácter excepcional con vigencia hasta el último día del mes en que finalice el Estado de Alarma.

8️⃣  Desaparecerá la prórroga automática de los subsidios de desempleo “durante el periodo de vigencia de las medidas extraordinarias en materia de salud pública…”

9️⃣  Desaparecerá la prestación extraordinaria para personas del sistema especial de empleados/as de hogar.

💥  Estas son las dramáticas consecuencias de impedir la prórroga del Estado de Alarma. Perderemos la más eficaz arma contra la pandemia en defensa de la vida y al menos 3 millones de hogares perderán sus únicos ingresos, su🛡escudo social. 



viernes, 1 de mayo de 2020

Orgullo de Clase


Manifiesto de Izquierda 
Unida con motivo 
de la celebración 
del 1º de Mayo de 2020
01/05/2020
Celebramos este 1º de Mayo, Día de la clase trabajadora, en unas condiciones inéditas: en plena crisis provocada por la pandemia mundial del coronavirus. Esta crisis sin precedentes está afectando no solo a la forma de relacionarnos y a nuestros hábitos cotidianos, también, y muy especialmente, a la economía y, por tanto, a las relaciones laborales y a las condiciones económicas de la clase trabajadora.
Desde Izquierda Unida creemos que hay una salida justa, social y democrática de la crisis, y que ello precisa un cambio profundo en las políticas económicas que vienen aplicando los diferentes gobiernos durante la última década. En la crisis económica del 2008 los gobiernos de turno facilitaron el despido, abarataron costes y desregularon el mercado de trabajo; deterioraron, en definitiva, los derechos de la clase trabajadora. Hoy, bajo el Gobierno de coalición las medidas están dirigidas a garantizar la protección de las clases populares, especialmente de los sectores más vulnerables.
La crisis sanitaria, que ya se ha transformado en una nueva crisis económica y social, no debe servir como coartada para que la mayoría social paguemos de nuevo los platos que rompió una minoría privilegiada que, como en 2008, está viendo oportunidades de negocio. Para ello, entendemos que son necesarias propuestas como el blindaje de los servicios públicos, más inversión pública y una reforma fiscal para que los ricos también paguen, como dice la Constitución.
Este 1º de Mayo va a ser un Día Internacional del Trabajo atípico en muchos sentidos, el más evidente va a ser la propia celebración de la jornada de lucha y reivindicación. Millones de trabajadores y trabajadoras estamos viendo el desmoronamiento de las políticas neoliberales mandatadas por una Unión Europea que debe abandonar el mensaje del ‘sálvese quien pueda’ si quiere estar a altura de este momento histórico. Desde Izquierda Unida seguimos apostando por la Europa de los pueblos, solidaria y democrática, que entienda esta crisis como una oportunidad para salir más fuertes en torno a medidas de inversión pública y protección social.
A este panorama complejo se suma la amenaza de la extrema derecha y de una derecha que se deja arrastrar a posiciones antidemocráticas. Las derechas han mostrado una actitud desleal y beligerante desde el primer día con el Gobierno de coalición porque, a pesar de las dificultades, defiende los derechos sociales de la clase trabajadora y de los sectores populares. Las derechas tienen un proyecto nítido de clase que pasa por el blindaje de los privilegios de las élites económicas. Desde el primer momento vieron en la crisis del coronavirus una oportunidad para acosar al Gobierno utilizando métodos hasta entonces inimaginables.
Las élites económicas y políticas no quieren derribar al Gobierno únicamente por cuestiones ideológicas, sino porque está sentando las bases para una salida de reconstrucción social, democrática y popular de la crisis. Algunos ejemplos de políticas que van en esta dirección son la facilitación de ERTES cubiertos por el Estado para que no se pierdan trabajos, la creación de una unidad de gestión para supervisar el cumplimiento de los derechos laborales, la prohibición de despidos, el permiso retribuido para trabajadores y trabajadoras no esenciales, el subsidio para las empleadas del hogar y la ampliación de la cobertura social, por ejemplo, a trabajadores y trabajadoras autónomas por primera vez en la historia de nuestro país. Estas políticas son las que realmente molestan a las élites económicas y a las derechas, y nos lleva a advertir que su gestión en estos momentos sería muy distinta, dramáticamente antidemocrática e injusta.
La crisis está poniendo de manifiesto que nos está salvando todo aquello que no existiría en el proyecto de sociedad de las derechas: servicios públicos, Estado protector y lazos comunitarios de cuidados. En su sociedad ‘ideal’ solo podrían salvarse los más ricos, aquellos que pudieran permitirse vivir aislados de la sociedad. Tras la crisis sanitaria y en los debates en torno a la reconstrucción social del país haremos hincapié en la necesidad de blindar servicios públicos como la Sanidad y la Educación, los sectores estratégicos de la economía, así como del reconocimiento efectivo de las labores de cuidados.
Denunciamos, un día como hoy, los ataques de las derechas a las organizaciones de clase, último bastión de defensa de los derechos de trabajadores y trabajadoras, tratando de debilitarlas en un momento en que son más necesarias que nunca. Ponemos en valor su papel como interlocutores sociales y como garantes de que el trabajo y los servicios se siguen prestando en las mejores condiciones de seguridad y salud, respetando los derechos y condiciones pactadas.
Desde Izquierda Unida seguimos anteponiendo los derechos de los trabajadores y las trabajadoras de nuestro país para que, en la senda de la justicia social, avancemos hacia una sociedad en la que hombres y mujeres convivamos en igualdad de oportunidades, donde el trabajo sea un derecho y todas las personas tengamos cubiertas las necesidades básicas para desarrollarnos dignamente como seres humanos.
Para ello necesitamos un cambio en el modelo productivo que acometa la reindustrialización que nuestro país necesita para ganar soberanía respecto a los llamados ‘mercados internacionales’, esto es, frente al gran capital trasnacional. Solo así dejaremos de depender de los especuladores, que únicamente buscan la maximización de sus beneficios privados por encima incluso de la salud de la ciudadanía.
La crisis del Covid-19 ha puesto de manifiesto las graves consecuencias de las políticas de privatización, con especial saña en el sector de la sanidad, en un momento en el que ha quedado claro que solo la Sanidad Pública nos protege a todos y a todas. Pese a la escasez de recursos generada por los recortes, los trabajadores y las trabajadoras sanitarias están dando un ejemplo de profesionalidad y de sacrificio.
No podemos pasar por alto que somos las mujeres, siempre, quienes más sufrimos las consecuencias del neoliberalismo y de las crisis. El empleo y los servicios de cuidados se ven afectados para las trabajadoras en general y, en particular, para las trabajadoras informales y las trabajadoras domésticas. La capacidad para conseguir nuestros medios de vida se ve altamente afectada por la crisis. Recordemos que las mujeres somos el 85% de personal de enfermería y casi el 100% del personal de limpieza de hospitales; somos el 70% de las trabajadoras de farmacias, el 90% de las limpiadoras de empresas, hoteles y hogares (incluido el servicio de empleadas domésticas) y cerca del 85% de las cajeras de supermercados. Tenemos que combatir la feminización de la pobreza, la falta de derechos, la división sexual del trabajo y la doble explotación.
La clase trabajadora no hemos olvidado lo que supuso la crisis del 2008. Los sectores más vulnerables se vieron obligados a sobrevivir gracias a las redes de solidaridad, mientras las oligarquías mantuvieron intactos sus privilegios a costa del deterioro de las condiciones de vida de la mayoría social. Por ello, en Izquierda Unida lo tenemos claro: un país justo y democrático sale adelante sin dejar a nadie atrás, es sensible con las personas más desprotegidas y defiende los derechos de quienes demuestran a diario con su esfuerzo que el motor del país son los trabajos a veces menos reconocidos. A todos ellos y ellas: gracias; por cuidarnos en los momentos difíciles y por sacar adelante el país cada día.
Por primera vez en las más de 35 modificaciones que ha sufrido el Estatuto de los Trabajadores, los sindicatos pueden intervenir en negociaciones, aunque no existan representantes sindicales en los centros de trabajo afectados. La labor de los compañeros y las compañeras sindicalistas que luchan en los centros de trabajo para defender los derechos laborales es imprescindible en la actual crisis. Hacemos un llamamiento a la organización sindical y colectiva de la clase trabajadora como mejor herramienta para nuestra defensa. De la misma manera, llamamos a participar en las movilizaciones sindicales, desde la gran movilización virtual convocada por CCOO y UGT, hasta cualquier otra reivindicación planteada para hoy por todas las organizaciones sindicales de clase en la lucha para mejorar las condiciones de la vida de la clase trabajadora.
Los trabajadores y las trabajadoras son esenciales siempre, con crisis y sin ella.
PARA QUE NADIE SE QUEDE ATRÁS
EN EL APOYO A LOS SINDICATOS DE CLASE
POR LA MEJORA DE LA VIDA DE LA MAYORÍA TRABAJADORA
VIVA EL 1º DE MAYO

PP/VOX: UNA SUBIDA IRREGULAR DE LOS SALARIOS POR LA PUERTA DE ATRÁS

Desde Izquierda Unida denunciamos que se suban el sueldo todavía mas _______________________________________________________ Recientemente t...